El Sol ya no saldrá para todos
El disidente
Por Antares Cervantes
Fue el medio escrito que la mayoría tenía en casa todas las mañanas, se podía pedir prestado al vecino a algún pariente o amigo, cuando la gente asistía a la tiendita de la esquina o a algún negocio mientras esperaba podía leerlo para enterarse de las noticias más relevantes de la entidad, el país y el mundo, posiblemente con el mayor pass along registrado, pues pasaba muchas veces de mano en mano en un solo día (vaya que manchaba los dedos después de leer su información), su contenido era de alto interés entre los hidalguenses, las notas sociales para ver a la élite de la entidad, los deportes principalmente para ver el rol de juegos de todos aquellos que participaban en diferentes disciplinas, soccer, beisbol, baloncesto etc. La nota policial y vial, los avisos para encontrar diversos servicios o empleo, crucigramas y pasatiempos, por supuesto los domingos los pequeños del hogar buscaban sus famosas historietas y dibujos, eso sí, después de ver a Chabelo desde muy temprano. Era el medio más influyente de aquellos años maravillosos en la bella airosa y gran parte del estado, un periódico multiusos, después de leerlo e informar a la población era reutilizado, las abuelas solían ponerlo en las jaulas de los canarios y no tener que lavar tanto, para limpiar los vidrios de las ventanas de la casa, del negocio o del automóvil, en este papel en las tiendas se despachaban diferentes tipos de semillas como el alpiste, en las ferreterías te daban clavos o tornillos, se cubrían cosas o el piso para no manchar al pintar, para hacer piñatas o envolver regalos, hasta se vendía por kilo para diversas aplicaciones.
Es conocido que este medio no supo realizar el cambio de lo impreso a lo digital, comenzaron a bajar su tiraje, de ser miles los ejemplares que circulaban día con día, actualmente son muy pero muy pocos, es inevitable que en breve dejen de salir de manera impresa. Intentan a través de su Newsletter ingresar a las diferentes plataformas y redes sociales, pero no han tenido el resultado esperado, el grupo editorial al que pertenecen sigue batallando para perpetrar la actualización al nuevo mundo de la información, pero, aquí, después de 75 años el único medio impreso que se vendía (ya que los demás siempre han sido gratuitos) ha tenido que realizar su reducción de nómina para lograr su cambio digital, desde la actual dirección, una docena de empleados fueron despedidos en marzo de 2021, una decena en noviembre del 2024 y se esperan más bajas.
Así es lo que una empresa hace para todos aquellos profesionales de la nota que tienen trayectorias y labores notables desde hace muchos años. Primero, pasaron de tamaño gran formato a tabloide y en la actualidad están a punto de desaparecer la edición impresa, el negarse a este cambio por resistencias internas desde su enorme grupo editorial, no ha funcionado, ya que lo impreso no es consumible (además contamina, según los expertos en la materia), leer, actualmente está a la mano de todos desde un dispositivo digital, por eso, diremos adiós a este medio impreso que tantos años llevó las noticias a miles de personas.
Algunos de sus reporteros de la vieja escuela, la gran escuela, esos a los que se les ve utilizando lápiz y papel para escribir la nota, sin celular ni grabadora, escuchando y poniendo atención a lo que se dice, esos grandes que aún realizan el proceso neurocognitivo en este hermoso arte de reportear, a todos ellos, mi respeto, afecto, reconocimiento y solidaridad por siempre, continúen siendo esos grandes de la información que tanta falta le hacen a este estado, sigan siendo esos dignos representantes de la libertad de expresión desde el nuevo lugar al que lleguen.