Perfil de México
Armando Ríos Ruiz
En un mundo globalizado, en donde las redes sociales trascienden a la velocidad de la luz y los quehaceres de las personas públicas se conocen también de inmediato, no es difícil informarnos de lo que pasa en todos los países cercanos, ni en los que se ubican en latitudes muy lejanas y hasta desconocidas para el mundo occidental.
Las múltiples decenas de mentiras que diariamente profiere nuestro Presidente. Las acciones negativas que diariamente se emprenden en México desde hace casi cuatro años, que sólo sirven para atraer la aprobación de los que no saben por qué viven y ni siquiera tienen conciencia de lo que ocurre con cada dislate que se anuncia y que incomodan sobradamente a la sociedad que piensa, también son conocidas en lugares remotos; criticadas y sancionadas.
Porque hoy, muchos lugares importantes del mundo tienen intereses en nuestro país.
Nada hará que cambie las conciencias de la ignorancia, salvo la visita personal, en el caso de los políticos, que buscan apoyos de millones de mexicanos que desean expresarse en las urnas, pero que están muy lejos de pretender enterarse por sí mismas de temas electorales, que les resultan muy complejos. Por ello son víctimas fáciles de las dádivas pecuniarias y de la presencia de candidatos que les prometen hasta la vida.
Por ello, la importancia de hacer recorridos que, en el México moderno, sólo ha hecho el actual mandatario. El paso por todos los caminos está plagado de pobreza, de desigualdad y de ignorancia. Hacer labor de convencimiento es más tedioso por el largo peregrinar que por dedicar un poco de tiempo a esas sociedades. Más difícil caminar que convencer.
Los informados de otros países, igual que los enterados de aquí, critican ácidamente las empresas que lleva a cabo nuestro mandatario. No por el prurito de fastidiar, sino porque sus intereses obligan a la vigilancia de los mismos y a reprobar. Que a nuestros próceres no les guste, es otra canción.
La firma inglesa Control Risks, dedicada a la gestión de riesgos, con un gran prestigio y presencia mundial, que la convierte en eco de lo bueno y malo que registra en todo el orbe, lanzó reproches que serán leídos en otros lugares del planeta, respecto a la constante promesa del Presidente mexicano, de que hacer prevalecer la integridad durante su mandato, no ha ido más allá del discurso.
Continúa: ’Como consecuencia de un discurso que no es más que papel mojado, las empresas en México seguirán enfrentando desafíos relacionados con la corrupción, al tiempo que estarán expuestas a riesgos de integridad y reputación’. No lo dice abiertamente. Seguro eso de integridad se refiere al acecho de las hordas desbordadas de la delincuencia, que se ha multiplicado a una velocidad supersónica, mientras el mandatario se esfuerza en proferir que en otros tiempos, como en el de Fox y Calderón, el crimen creció como nunca y durante su mandato es visible su disminución. ¡Los abrazos funcionan!
’El informe sostiene que las encuestas internacionales especializadas en medir las percepciones de corrupción y la capacidad de los países para responder a este fenómeno, revelan que México está rezagado con respecto al promedio en América Latina, ’destacando el fracaso de AMLO’.
¿Qué dirá el mandatario frente a estas aseveraciones? ¿Qué quien las observa es neoliberal, conservador o fifí? ¿O simplemente que sus enemigos pagaron a la empresa para desprestigiarlo? ’El documento –dice la información− muestra la permanente degradación de México desde 2019, colocándolo en la posición 12, de mejor a peor, sólo detrás de Venezuela, Bolivia y Guatemala. En la edición anterior el país había figurado en el escalafón 11’.
El documento registra sólo una un mínimo, pero de grandes repercusiones, de lo que México ha enfrentado en cuatro años. El espacio de esta columna es insuficiente para rescatar la mayor parte del análisis.
ariosruiz@gmail.com